miércoles, 21 de julio de 2010

Libros Electrónicos



¿Que son los libros electrónicos?


¿Para que sirven?


¿Les gustaría saber de donde provienen y sus historias antiguas?

Presionen Mayor información






Una de las definiciones de la palabra “libro” que podemos encontrar en cualquier diccionario o enciclopedia es “conjunto de varias páginas de papel, papiro u otro material en el que se puede escribir, unidas entre sí y que contiene textos, ilustraciones o música”.
Los primeros libros consistían en planchas de barro que contenían caracteres o dibujos hechos con un punzón. Las primeras civilizaciones que los utilizaron fueron los pueblos de Mesopotamia, entre ellos los sumerios y los babilonios. Mucho más próximos a los libros actuales están los rollos de los egipcios, griegos y romanos, compuestos por largas tiras de papiro "Un material parecido al papel que se extraía de los juncos del delta del río Nilo" que se enrollaban alrededor de un palo de madera. A parte del papiro se utilizaron pieles secas de animales como materia prima en la elaboración de libros, a tal punto que el rey Eumenes II de Pérgamo lo sustituyó por completo.
Pero como veremos esta definición difiere un poco de la realidad actual en que nos encontramos, ya que un libro no necesariamente está en papel sino que puede adoptar la forma de dispositivos magnéticos como discos duros o diskette.
Debido al avance tecnológico, actividades cotidianas como comprar, escuchar música, enviar correspondencia y otras pueden realizarse de una manera fácil y sencilla con solo sentarse a un computador y accesar al mundo fantástico del internet. Esto significa que si podemos realizar estas cosas, quien nos dice que no podemos conseguir libros a través de este medio.
Esta modalidad en libros es lo que se conoce como ‘libros electrónicos’. Estos libros son aparatos grandes o más bien parecidos a tomos de enciclopedia que se fabrican con la finalidad de que el lector se sienta cómodo y en casa al usar este aparato. Al abrir el libro despliega en su interior dos pantallas coloridas que nos permiten seleccionar el texto a leer y navegar por el mismo. El manejo es completamente visual y se hace seleccionando opciones gráficas en la pantalla sensible al tacto. Si se desea adquirir nuevos libros, solo debemos conectar el aparato a internet a través de un modem y seleccionamos de la amplia biblioteca disponible, pagando electrónicamente por los libros adquiridos con la tarjeta de crédito. Aunque estos dispositivos tienen suficiente capacidad de almacenamiento para guardar varios libros, las informaciones adquiridas por medio a ellos se pueden almacenar en tarjetas digitales o cartuchos removibles.
Además de este servicio virtual, podemos crear nuestra biblioteca electrónica de manera gratuita. Existen proyectos que proporcionan libros en cualquier idioma, estos libros no tienen ningún tipo de formato ya que sólo son textos, puro texto, para que puedan ser compatibles con cualquier sistema computacional. No solo eso, hay una gama diversa de páginas en el cyber espacio que nos permiten descargar fragmentos de libros a nuestro computador sin pagar un centavo.
Es decir, a la hora de comprar un libro, el lector sabrá la temática o los puntos que puede encontrar en el mismo y no tendrá que comprarlo por simple intuición.
Esto no significa que las ediciones de libros en papel están en extinción; ya que en la mayoría de los países subdesarrollados, como el nuestro, el tener una computadora en su hogar es un privilegio de unos cuantos. Aunque estos “cuantos” cada día sean mayores, existen muchas familias que por su condición de analfabetas es un obstáculo para ellos proveerse de este mecanismo. Y no solo eso, mientras existan empresas dedicadas a la publicación de libros, este negocio no desaparecerá.
Pero sin lugar a dudas, tanto los libros electrónicos como las páginas proveedoras de libros gratuitos son una excelente alternativa para nosotros como estudiantes, de adquirir el conocimiento necesario gracias a la expansión y auge de la tecnología.

No hay comentarios:

Publicar un comentario